sábado, 29 de diciembre de 2012
Querido tú
Es el momento de escribirte lo que nunca fui capaz de decirte, aunque sea tarde...
De escribir lo que ha sucedido en una carta que no te voy a mandar, que no vas a
recibir nunca. Que, como tu me enseñaste, en cuanto acabe de escribirla la
quemaré... Mis sentimientos se pondrán a arder, y así el dolor... ¿Cómo era?
¿Cómo decías tú? Ahhh ya... Así el dolor no se te queda tan dentro. Esta vez
solo quiero ser clara, sería una imbécil si no gritara que me he equivocado...
Contigo... Que la he cagado, pero bien... Desde el principio... Que he intentado
avanzar sin apartar antes las cosas que me lo impedían. Agarrado al pasado,
mirando para atrás, queriendo olvidar pero sin parar de recordar. Puff... Qué
locura, Empeñado en quedarme ahí... En medio de un lado y del otro... Sin
perdonar... Sin perdonarme... Sin avanzar... ¿Dónde está el secreto del futuro? Puede que esté en fijarse bien... Y en avanzar... Mirar más cerca... Más.
Tan cerca que lo borroso se vuelve nítido, se vuelve claro... ¡Claro! Hay cosas
que pasaron antes, mucho antes. No quiero esperar milagros, solo que las cosas
pasen. Sí... No... Sí... No... Sí... No... Y ahora lo tendría claro, pero ahora
ya no depende de mí, sino de tí. Te quiero...
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